Bienvenidos al fascinante mundo imaginario del Valle de los Mumin, donde es imposible no enamorarse de inmediato de sus habitantes: tiernos soñadores, maquinadores irascibles, y creativos y curiosos, siempre en busca de amor, fama y fortuna. Tal vez sea por las pocas aptitudes de Mumintroll para la construcción, la desesperación de la Mimbla para llamar la atención de don Fresco, la rigidez de la ...