Creo en el amor y la amistad a primera vista. En el caso de Javier Campos, poeta chileno, fue así. Es un aristócrata de espíritu y sus manos son grandes. Le encanta la comida sencilla, campesina, y se viste con gusto, pero no de modo deslumbrante. Como muchos chilenos, tuvo que abandonar su tierra natal. Pero él tuvo suerte: se hizo profesor y escribe ...