"Nada en común" ya es un título, de por sí, provocativo. Atrevido título en unos tiempos donde formar parte de un rebaño de cualquier índole parece obligado para vivir en sociedad. Esa aparente negación absoluta no es lo habitual. A la gente le gusta buscar lo que hay en común, parece que eso les refuerza y les da seguridad. Un libro con este título ...