Un hombre camina por las calles de Montreal, piensa en Shoreh, la hermosa bailarina iraní de cabello negro por quien haría cualquier cosa. Observa seres diminutos caminando sobre los marcos de las ventanas deslizándose hacia el interior sin que nadie lo note. Tal como él lo hace algunas veces al entrar en cuartos en penumbra para robar el calor abandonado entre las sábanas de ...