Ferenc Molnár (1878-1952) nació en el seno de una acomodada familia de la capital húngara y muy pronto ejerció como periodista. Desde el año 1900 dio a luz novelas, cuentos y decenas de piezas teatrales, pero su obra maestra es sin duda Los chicos de la calle Pál el gran clásico de la literatura juvenil húngara y uno de sus títulos más traducidos.