José Ovejero (Madrid, 1958) vive a caballo entre Madrid y Bruselas, donde combina su pasión por la literatura con las colaboraciones periodísticas. Desde que ganara el Premio Ciudad de Irún 1993 con su poemario Biografía del explorador, ha cultivado todos los géneros, siendo especialmente reseñables su libro de viajes China para hipocondríacos, merecedor del Premio Grandes Viajeros 1998, y su novela Las vidas ajenas, ganadora del Premio Primavera 2005. Desde su primer galardón hasta el último, el autora ha continuado cultivando el género narrativo con novelas como Añoranza del héroe (1997), Huir de Palermo (1999) y Un mal año para Miki (2003), con libros de relatos como Cuentos para salvarnos a todos (1996), Qué raros son los hombres (2000) y Mujeres que viajan solas (2004), y con ensayos como Bruselas (1996).
Un puro gozo literario de inteligencia y de humor en la línea de la gran tradición europea de un Dino Buzzati o un Roald Dahl. Hacemos leer los cuentos de hadas a los niños para que aprendan a distinguir el bien del mal y extraigan enseñanzas sobre problemas existenciales. ¿Pero que ocurriría con tales valores si le diéramos la vuelta a esos mismos cuentos? José Ovejero ...
La tranquila y acomodada vida de Carmela y Nico, un matrimonio de clase media, se ve amenazada con la llegada de dos personas aparentemente desvinculadas entre sí: Olivia, una joven ecuatoriana que les ayuda en casa, y Claudio, un adolescente alumno de Nico. José Ovejero propone en Nunca pasa nada un retablo de la sociedad actual que pone de manifiesto la inestabilidad de la vida ...
Un puro gozo literario de inteligencia y de humor en la línea de la gran tradición europea de un Dino Buzzati o un Roald Dahl. Hacemos leer los cuentos de hadas a los niños para que aprendan a distinguir el bien del mal y extraigan enseñanzas sobre problemas existenciales. ¿Pero que ocurriría con tales valores si le diéramos la vuelta a esos mismos cuentos? José Ovejero ...
La tranquila y acomodada vida de Carmela y Nico, un matrimonio de clase media, se ve amenazada con la llegada de dos personas aparentemente desvinculadas entre sí: Olivia, una joven ecuatoriana que les ayuda en casa, y Claudio, un adolescente alumno de Nico. José Ovejero propone en Nunca pasa nada un retablo de la sociedad actual que pone de manifiesto la inestabilidad de la vida ...