(Sevilla, 1960) se licenció en Filosofía Pura en la Universidad de Sevilla, en 1982. Ha sido director de Er, Revista de Filosofía (1985-2005), profesor de bachillerato por oposición libre (1984), profesor en la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona (1994-2005) y en la Universidad de Sevilla (2011-2018). Ha sido becario en el Hegel-Archiv de la Ruhr-Universität de Bochum y en el Istituto Italiano per gli Studi Filosofici de Nápoles. Es autor de traducciones, artículos y monografías sobre Hegel y el Idealismo alemán. En 1992 ganó el Premio Ignacio Aldecoa de relatos con La Torre, una fábula hegeliana. Fue corresponsable de la edición del suplemento Culturas de Diario de Sevilla y las restantes cabeceras del Grupo Joly. Ha sido columnista de opinión en las ediciones catalana y andaluza de El Mundo y articulista ocasional en El Correo Español y otros diarios.
Hegel es hoy un filósofo incómodo. Incomoda la secreta vigencia de su pensamiento, su condición de rocoso contemporáneo clandestino contra el que, antes o después, topa cualquier filósofo vivo. Incomoda su prosa, inextricable para el lector común y extenuante para los iniciados. Incomoda la lucidez y crueldad de sus ideas, nada edificantes y completamente inservibles para manuales de autoayuda. Incomoda su defensa del trabajo ...
Hegel es hoy un filósofo incómodo. Incomoda la secreta vigencia de su pensamiento, su condición de rocoso contemporáneo clandestino contra el que, antes o después, topa cualquier filósofo vivo. Incomoda su prosa, inextricable para el lector común y extenuante para los iniciados. Incomoda la lucidez y crueldad de sus ideas, nada edificantes y completamente inservibles para manuales de autoayuda. Incomoda su defensa del trabajo ...