W.G. Sebald (1944-2001) nacio en Wertach, Alemania, vivio en Suiza, despues de acabar sus estudios universitarios, y luego en Inglaterra. Desde 1970 fue profesor en Norwich. Murio en accidente automovilistico el 14 de diciembre de 2001.
En este poema en prosa, W. G. Sebald hizo de su amor a la Naturaleza, pero también de su temor a ella, su tema decisivo: Del natural, una obra maestra del lenguaje sobre la vida de tres personajes que sintieron dolorosamente, cada uno a su manera, el conflicto entre Hombre y Naturaleza, es un libro insólito de un escritor que sólo escribió libros insólitos.Subtitulado ...
El escritor emprende un viaje a pie por el condado de Suffolk, en la costa este de Inglaterra, para llenar el vacío que se ha apoderado de su interior al haber concluido un trabajo importante. Mientras contempla paisajes solitarios y pequeñas poblaciones costeras se topa con vestigios de un pasado que le remite a la totalidad del mundo, enmarcado en multitud de épocas, espacios ...
Este libro ejemplifica como pocos la idea de que la obra postrera de un autor se transforma en involuntario legado. Austerlitz es el último libro que Sebald publicó en vida, y sin duda una de las novelas más ineludibles de la segunda mitad del siglo XX. Pero es también una novela fantasma: el retrato fascinado de una Europa recién desaparecida.
Cuando en diciembre de 2001 murió Sebald en un accidente de automóvil, quedó interrumpida la obra de uno de los autores contemporáneos en lengua alemana más importantes. Dos años después aparece este libro editado por Sven Meyer que recoge obras de su legado. El meollo del texto, «Pequeña excursión a Ajaccio», «Campo Santo», «Los Alpes en el mar» y «La cour de l’ancienne école», ...
Los relatos con orla negra de W. G. Sebald cuentan cosas cotidianas e inquietantes, son testigos minuciosos y excesivos de un desajuste pertinaz. De las grietas de la memoria asoman «hechos casuales», ya amenazadores, ya reconfortantes. Sin embargo, el leve infierno de la depresión no deja mudo al escritor, sino que parece percibir el mundo con más agudeza. Bajo el signo de la melancolía ...
El escritor emprende un viaje a pie por el condado de Suffolk, en la costa este de Inglaterra, para llenar el vacío que se ha apoderado de su interior al haber concluido un trabajo importante. A la vista de paisajes solitarios y pequeñas poblaciones se topa con vestigios de un pasado que le remite a la totalidad del mundo, enmarcado en multitud de épocas, ...
Comentando un fragmento en prosa de Robert Walser (1878-1956) sobre la ceniza, W. G. Sebald escribe: «Lo altamente emotivo de ese pasaje». Esta misma frase podría aplicarse también a El paseante solitario, un libro breve para leer despacio y de un tirón, que consigue, con un estilo personal y preciso, hacernos caminar al lado de Robert Walser y mirar el mundo, las cosas, casi ...
Sin contar es un libro de miniaturas poéticas, o haikus, de W. G. Sebald con grabados del pintor alemán Jan Peter Tripp, amigo suyo desde la infancia. La finalidad es que texto e imagen entablen un diálogo en el que cada uno tenga su propia resonancia.
Los emigrados es un relato melancólico, nada épico, sobre el desarraigo. Sebald recrea las vidas de cuatro exiliados (cinco, si se incluye su propio autorretrato indirecto) a través de lo que narran ellos mismos, de recuerdos ajenos, fotografías y objetos encontrados. Al intentar reconstruir el pasado de su antiguo casero, Henry Selwyn, de un antiguo maestro de la escuela primaria, Paul Bereyter, el de ...
Durante la Segunda Guerra Mundial, 131 ciudades y pueblos alemanes fueron tomados como objetivo de las bombas de los Aliados, buen número de ellos resultaron arrasados casi por completo. Murieron seiscientos mil civiles alemanes: una cifra que duplica el número de las bajas de guerra sufridas por los americanos. Siete millones y medio de alemanes quedaron sin hogar. El autor se hace una pregunta: ...
En 1985, Sebald publica una recopilación de escritos sobre literatura austríaca con el título de La búsqueda de la infelicidad. Su propuesta es que esa literatura se caracteriza por «la infelicidad del que escribe», una infelicidad que no tiene que ver con el deseo de morir sino que es una forma de resistencia. Entre los ensayos aquí recogidos destacan los que dedica a Schnitzler ...
En este poema en prosa, Sebald hace del amor y del temor a la Naturaleza su tema decisivo: una obra maestra del lenguaje, sobre la vida de tres hombres que sintieron dolorosamente el conflicto entre Hombre y Naturaleza. El libro o «poema rudimentario», como lo subtituló Sebald, tiene forma de tríptico. El primer panel está dedicado a Matthias Grünewald, pintor de santos, crucifixiones, eclipses ...
En la oscura nave de la estación de Amberes ?así empieza su historia el narrador? había un hombre joven, rubio, con pesadas botas de excursionista, pantalones de faena azules y una vieja mochila, ocupado intensamente en tomar notas y hacer dibujos en un cuaderno. El narrador lo observa fascinado y comienza entonces una relación que se desarrolla durante decenios. Jacques Austerlitz se llama el ...
En la oscura nave de la estación de Amberes había un hombre joven, rubio, con pesadas botas de excursionista, pantalones de faena azules y una vieja mochila, ocupado intensamente en tomar notas y hacer dibujos en un cuaderno. El narrador lo observa fascinado y comienza entonces una relación que se desarrolla durante decenios. Jacques Austerlitz se llama el enigmático extranjero. Vive en Londres desde ...
En este poema en prosa, W. G. Sebald hizo de su amor a la Naturaleza, pero también de su temor a ella, su tema decisivo: Del natural, una obra maestra del lenguaje sobre la vida de tres personajes que sintieron dolorosamente, cada uno a su manera, el conflicto entre Hombre y Naturaleza, es un libro insólito de un escritor que sólo escribió libros insólitos.Subtitulado ...
El escritor emprende un viaje a pie por el condado de Suffolk, en la costa este de Inglaterra, para llenar el vacío que se ha apoderado de su interior al haber concluido un trabajo importante. Mientras contempla paisajes solitarios y pequeñas poblaciones costeras se topa con vestigios de un pasado que le remite a la totalidad del mundo, enmarcado en multitud de épocas, espacios ...
Este libro ejemplifica como pocos la idea de que la obra postrera de un autor se transforma en involuntario legado. Austerlitz es el último libro que Sebald publicó en vida, y sin duda una de las novelas más ineludibles de la segunda mitad del siglo XX. Pero es también una novela fantasma: el retrato fascinado de una Europa recién desaparecida.
Cuando en diciembre de 2001 murió Sebald en un accidente de automóvil, quedó interrumpida la obra de uno de los autores contemporáneos en lengua alemana más importantes. Dos años después aparece este libro editado por Sven Meyer que recoge obras de su legado. El meollo del texto, «Pequeña excursión a Ajaccio», «Campo Santo», «Los Alpes en el mar» y «La cour de l’ancienne école», ...
Los relatos con orla negra de W. G. Sebald cuentan cosas cotidianas e inquietantes, son testigos minuciosos y excesivos de un desajuste pertinaz. De las grietas de la memoria asoman «hechos casuales», ya amenazadores, ya reconfortantes. Sin embargo, el leve infierno de la depresión no deja mudo al escritor, sino que parece percibir el mundo con más agudeza. Bajo el signo de la melancolía ...
El escritor emprende un viaje a pie por el condado de Suffolk, en la costa este de Inglaterra, para llenar el vacío que se ha apoderado de su interior al haber concluido un trabajo importante. A la vista de paisajes solitarios y pequeñas poblaciones se topa con vestigios de un pasado que le remite a la totalidad del mundo, enmarcado en multitud de épocas, ...
Comentando un fragmento en prosa de Robert Walser (1878-1956) sobre la ceniza, W. G. Sebald escribe: «Lo altamente emotivo de ese pasaje». Esta misma frase podría aplicarse también a El paseante solitario, un libro breve para leer despacio y de un tirón, que consigue, con un estilo personal y preciso, hacernos caminar al lado de Robert Walser y mirar el mundo, las cosas, casi ...
Sin contar es un libro de miniaturas poéticas, o haikus, de W. G. Sebald con grabados del pintor alemán Jan Peter Tripp, amigo suyo desde la infancia. La finalidad es que texto e imagen entablen un diálogo en el que cada uno tenga su propia resonancia.
Los emigrados es un relato melancólico, nada épico, sobre el desarraigo. Sebald recrea las vidas de cuatro exiliados (cinco, si se incluye su propio autorretrato indirecto) a través de lo que narran ellos mismos, de recuerdos ajenos, fotografías y objetos encontrados. Al intentar reconstruir el pasado de su antiguo casero, Henry Selwyn, de un antiguo maestro de la escuela primaria, Paul Bereyter, el de ...
Durante la Segunda Guerra Mundial, 131 ciudades y pueblos alemanes fueron tomados como objetivo de las bombas de los Aliados, buen número de ellos resultaron arrasados casi por completo. Murieron seiscientos mil civiles alemanes: una cifra que duplica el número de las bajas de guerra sufridas por los americanos. Siete millones y medio de alemanes quedaron sin hogar. El autor se hace una pregunta: ...
En 1985, Sebald publica una recopilación de escritos sobre literatura austríaca con el título de La búsqueda de la infelicidad. Su propuesta es que esa literatura se caracteriza por «la infelicidad del que escribe», una infelicidad que no tiene que ver con el deseo de morir sino que es una forma de resistencia. Entre los ensayos aquí recogidos destacan los que dedica a Schnitzler ...
En este poema en prosa, Sebald hace del amor y del temor a la Naturaleza su tema decisivo: una obra maestra del lenguaje, sobre la vida de tres hombres que sintieron dolorosamente el conflicto entre Hombre y Naturaleza. El libro o «poema rudimentario», como lo subtituló Sebald, tiene forma de tríptico. El primer panel está dedicado a Matthias Grünewald, pintor de santos, crucifixiones, eclipses ...
En la oscura nave de la estación de Amberes ?así empieza su historia el narrador? había un hombre joven, rubio, con pesadas botas de excursionista, pantalones de faena azules y una vieja mochila, ocupado intensamente en tomar notas y hacer dibujos en un cuaderno. El narrador lo observa fascinado y comienza entonces una relación que se desarrolla durante decenios. Jacques Austerlitz se llama el ...
En la oscura nave de la estación de Amberes había un hombre joven, rubio, con pesadas botas de excursionista, pantalones de faena azules y una vieja mochila, ocupado intensamente en tomar notas y hacer dibujos en un cuaderno. El narrador lo observa fascinado y comienza entonces una relación que se desarrolla durante decenios. Jacques Austerlitz se llama el enigmático extranjero. Vive en Londres desde ...