La realidad está hecha de pequeñas esquirlas y en Nombrar la herida Javier Bozalongo las hace visibles con una naturalidad y una crudeza admirables. Retorcer el lenguaje para que esa realidad salga a flote no es una tarea sencilla, sin embargo, Bozalongo nos conduce de la mano y nos insta a caminar a través de las vidas de más de una quincena de mujeres ...