Bernardo Esquinca (Guadalajara, Mexico, 1972) cuenta con un amplio reconocimiento por parte de la critica y los lectores en su pais. Su obra se inscribe en la llamada «ficcion de lo extraño» (Weird fiction), mezclando los generos policiaco, fantastico y de terror. Es autor de las novelas Belleza roja (FCE, 2005), Los escritores invisibles (FCE, 2009), La octava plaga (2011), Toda la sangre (Almadia, 2013) y Carne de ataud (Punto de Vista Editores, 2018), las tres ultimas pertenecientes a la saga
Eugenio Casasola lleva una vida tranquila: tiene un empleo rutinario, disfruta de una relación romántica e incluso los contactos con el más allá han cesado. Sin embargo, la desaparición de un libro maldito relacionado con el astrónomo de Hernán Cortés hace peligrar esta calma. Sociedades secretas y una puerta capaz de unir el pasado con el presente ponen a nuestro protagonista como epicentro de ...
Eugenio Casasola trabaja como cronista de nota roja en El Imparcial. Una serie de asesinatos le pone sobre la pista de El Chalequero, asesino en serie ya encarcelado por matar prostitutas. Murcia, amante de Eugenio, fue una de sus víctimas. Una médium, Madame Guillot, lo ayudará a comunicarse con su espíritu y lo llevará a conocer los secretos del más allá. Mientras tanto el ...
Eugenio Casasola lleva una vida tranquila: tiene un empleo rutinario, disfruta de una relación romántica e incluso los contactos con el más allá han cesado. Sin embargo, la desaparición de un libro maldito relacionado con el astrónomo de Hernán Cortés hace peligrar esta calma. Sociedades secretas y una puerta capaz de unir el pasado con el presente ponen a nuestro protagonista como epicentro de ...
Eugenio Casasola trabaja como cronista de nota roja en El Imparcial. Una serie de asesinatos le pone sobre la pista de El Chalequero, asesino en serie ya encarcelado por matar prostitutas. Murcia, amante de Eugenio, fue una de sus víctimas. Una médium, Madame Guillot, lo ayudará a comunicarse con su espíritu y lo llevará a conocer los secretos del más allá. Mientras tanto el ...