Los dramas de reyes shakespearianos parecen haber encontrado una especie de contrapunto en los de princesas jelinekianos. Aun cuando, tal y como Elfriede Jelinek destaca, la mujer no se pueda constituir como sujeto dramático, es decir, como protagonista en el sentido clásico, ahí está Blancanieves, sin embargo, buscando la verdad detrás de la belleza, más allá de las montañas, con los siete enanitos, para ...