Hacia el final de sus vidas, Shakespeare, en La tempestad (1611), su última obra teatral, y Cervantes, en “La ínsula Barataria” –el Quijote, Segunda Parte (1615)–, coincidieron en adoptar, curiosamente, un escenario insular.
A partir de esos legados, se busca recomponer la ardua fisonomía de unas islas inmersas en lo que Seamus Heaney llamó “los seculares poderes del tormentoso Atlántico”; acaso, porque, a ...
20,00 €
Disponible 2 días