La palabra felicidad, escribía recientemente Lledó, es una idea casi trivial y, a la vez, una aspiración insoslayable, medio perdida «en ese horizonte de sueños, ideales, deseos, utopías, amenazas y dolores» que nos atrapa y nos envuelve. Así que esa escurridiza palabra «nos hace pensar que estar en el mundo es estar en la insuficiencia, en la insatisfacción». En consecuencia, si la felicidad es ...