Yo era arcilla blanda cuando toqué esas costas de delirio, y piedra inmutable cuando las dejé, dice el protagonista y narrador de esta historia. Luego de sesenta años de esa experiencia alucinante, que lo marcaría para el resto de su vida, en el silencio de la noche y a la luz de una vela, recompone los momentos más importantes de los diez años que ...