EL LIBRO DE LOS MÁRGENES III

"El libro es mi universo, mi país, mi techo y mi enigma. [···] es mi respiración y mi reposo." Con estas palabras se expresaba Jabès en El libro de las preguntas, uno de los libros de poesía europea quizás más misteriosos y a la vez importantes del siglo XX. El exilio, la ausencia, la errancia, el desierto, el nexo entre hebraísmo y escritura, la memoria... He ahí una serie de conceptos de los cuales nace la palabra de este particularísimo escritor.

Nacido en El Cairo en el 1912, hijo de una familia judía italiana, Edmond Jabès recibió una educación colonial francesa, y empezó a escribir en esa lengua a una temprana edad -razón por la cual se le concedió la distinción de Caballero de la Legión de Honor en 1952 por sus logros literarios. Tras la expulsión de los judíos de Egipto, Jabès se instaló en París, en el 1957, gracias a la ayuda de amigos como René Char, Max Jacob y Maurice Nadeau, iniciando una continuada reflexión que le acercará progresivamente a la construcción de una poética fiel.

Una de sus obras más importantes es El Libro de las preguntas (1963-1973), que le consagró como un escritor reconocido. A este ciclo de siete tomos, le siguió Le Livre des ressemblances (1976-1980) y el Livre des marges. De estructura aforística, a menudo, con un saber inabarcable, perfilado a través de sentencias, paradojas, semblanzas, Jabès construyó una poética propia, en la que la búsqueda por si misma, una deriva hermenéutica, se erige en leitmotiv. Una exploración poética constante, un itinerario casi obsesivo -cuyos frutos marcaron indeleblemente, por cierto, el pensamiento de Maurice Blanchot y de Jacques Derrida- que él mismo se atrevió a definir como un judaïsme après Dieu. La esctitura, para Jabès, fue sin duda un signo de esperanza a la vez que la manifestación de una herida. De la ausencia de Dios a la recuperación de la palabra, he aquí una exégesis infinita.

Busquemos pues.-