Adan Kovacsics (1953) es traductor del húngaro y del alemán. Nacido en Santiago de Chile, es hijo de inmigrantes húngaros. Premiado en numerosas ocasiones por el Ministerio de Educación y Cultura de Austria ? por las traducciones de Karl Kraus: Los últimos días de la humanidad (1992), Hans Lebert: La piel del lobo (1994), Heimito von Doderer: Un asesinato que todos cometemos, Hans Lebert: El círculo de fuego (1996), Peter Altenberg: Páginas escogidas (1998), Joseph Roth: Las ciudades blancas, Stefan Zweig: Embriaguez de la metamorfosis (2001), Ingeborg Bachmann: El caso Franza/Réquiem por Fanny Goldmann (2002), Karl Kraus: Dichos y contradichos (2004), Ilse Aichinger: La esperanza más grande (2005) ? a finales del año 2004, recibió en Barcelona el Premio Ángel Crespo, uno de los más relevantes otorgados en España, por su traducción de la novela El distrito de Sinistra (Acantilado) del escritor húngaro transilvano Ádám Bodor. Ha recibido asimismo el II Premio de Traducción Imre Kertész (2007), el Premio Nacional de Traducción 2010 del Ministerio de Cultura por el conjunto de su obra y el Premio Nacional de Traducción de Austria por el conjunto de su obra y por sus traducciones de Karl Kraus. Vive en Barcelona y escribe también ensayos sobre las literaturas húngara y austriaca.
El libro explora a través de breves relatos y desde ángulos diversos tanto al extranjero que está entre nosotros como al que está dentro de nosotros. Porque estamos escindidos, los átomos que nos componen son afines, pero también ajenos unos a otros, como afines y ajenas son unas a otras las personas que conviven en una sociedad.
Un hombre aparece como una enigmática sombra en medio de un grupo de veraneantes en un paisaje cercano a los Alpes. Un corresponsal de guerra expone sus tribulaciones en un discurso incontenible. Un mensajero escribe una carta desesperada en la cual narra sus experiencias, trabajos y contemplaciones, así como su paso por un centro psiquiátrico. Un viajante conoce a una singular exiliada. Alguien que ...
En el fragor de la Gran Guerra, el ejército austrohúngaro creó un Cuartel de Prensa donde trabajaron escritores con la tarea de crear propaganda para ensalzar el esfuerzo de sus soldados en el frente. De ese modo se establecía una nueva relación entre la actividad literaria y la maquinaria bélica. Viena era entonces el auténtico centro intelectual de Occidente, y también el epicentro de ...
El 19 de noviembre de 1914, ante el nutrido público que se congregaba en la Sala Media de la Konzerthaus de Viena, Karl Kraus leyó "En esta gran época", texto con el que rompía el silencio en que lo había sumido el estallido de la Primera Guerra Mundial. Ahí denunciaba la connivencia de la prensa con el delirio bélico y proclamaba que "en estas ...
Cuando leemos Los últimos días de la Humanidad, que es un Apocalipsis cómico y patético del horror de la Primera Guerra Mundial, reír es... una forma de llorar y, así mismo y sobre todo, de tomar conciencia de la gravedad de estos problemas; y más cuando se hace una lectura actual de la obra, desde el conocimiento histórico de que la humillación que sufrieron ...
El libro explora a través de breves relatos y desde ángulos diversos tanto al extranjero que está entre nosotros como al que está dentro de nosotros. Porque estamos escindidos, los átomos que nos componen son afines, pero también ajenos unos a otros, como afines y ajenas son unas a otras las personas que conviven en una sociedad.
Un hombre aparece como una enigmática sombra en medio de un grupo de veraneantes en un paisaje cercano a los Alpes. Un corresponsal de guerra expone sus tribulaciones en un discurso incontenible. Un mensajero escribe una carta desesperada en la cual narra sus experiencias, trabajos y contemplaciones, así como su paso por un centro psiquiátrico. Un viajante conoce a una singular exiliada. Alguien que ...
En el fragor de la Gran Guerra, el ejército austrohúngaro creó un Cuartel de Prensa donde trabajaron escritores con la tarea de crear propaganda para ensalzar el esfuerzo de sus soldados en el frente. De ese modo se establecía una nueva relación entre la actividad literaria y la maquinaria bélica. Viena era entonces el auténtico centro intelectual de Occidente, y también el epicentro de ...
El 19 de noviembre de 1914, ante el nutrido público que se congregaba en la Sala Media de la Konzerthaus de Viena, Karl Kraus leyó "En esta gran época", texto con el que rompía el silencio en que lo había sumido el estallido de la Primera Guerra Mundial. Ahí denunciaba la connivencia de la prensa con el delirio bélico y proclamaba que "en estas ...
Cuando leemos Los últimos días de la Humanidad, que es un Apocalipsis cómico y patético del horror de la Primera Guerra Mundial, reír es... una forma de llorar y, así mismo y sobre todo, de tomar conciencia de la gravedad de estos problemas; y más cuando se hace una lectura actual de la obra, desde el conocimiento histórico de que la humillación que sufrieron ...