"Nadie como Emmanuel Bove ha tenido un sentido tan agudo del detalle", dijo Samuel Bekett de este autor olvidado, que hoy reivindican con tanto entusiasmo justificado en Francia, y que a los veinticinco años escribió una obra maestra, una novela sorprendente traducida ya a varios idiomas.
Aquella novela, MIS AMIGOS, desde que deslumbrara a Colette, su primera editora, no ha hecho más que despertar ...